El recorte de 2.700 millones y el euro por receta no impiden a Ignacio González impulsar un aeródromo comercial y dejar otro en el aire. Adelson exige un carril más para la A-5. Rumores sobre la conexión de Paracuellos-Torrejón con Barajas por alta velocidad.
Las estaciones de alta velocidad sin pasajeros, los aeropuertos sin aviones y las carreteras sin coches –tres símbolos reales de la España del despilfarro- no se han terminado después de cinco años de crisis. O al menos eso parece en la Comunidad de Madrid. Tras asumir un proyecto como el de Eurovegas, algo que parecía imposible hace solo unos meses, el Gobierno regional, inmerso en una espiral de austeridad sin precedentes, se propone complacer al impulsor del proyecto, el magnate Sheldon G. Adelson, en todo cuanto pida. Y lo que pide no es poco: exenciones fiscales, tolerancia con el tabaco y más de las costosas infraestructuras que han retratado al país en los últimos años, AVEs, autovías y terminales aéreas.
Así pues, el presidente Ignacio González ha recortado esta semana 2.700 millones de euros en el Presupuesto del año que viene y ha normalizado el pago de un euro por receta. Pero González tiene otros planes: para empezar, el pasado 18 de octubre el portavoz del Gobierno Salvador Victoria anunció que Madrid sacará a concurso la construcción y gestión del aeropuerto del Suroeste, un aeródromo situado entre los municipios de El Álamo y Navalcarnero. Según Victoria, el aeropuerto, que no tiene fecha, estará especializado en viajes de negocios y será gestionado por una empresa privada. “No supondrá ningún coste para las arcas públicas y los madrileños no tendrán que poner ni un euro”,afirmó. La ubicación de los terrenos está a una treintena de kilómetros de el páramo de Alcorcón que supuestamente interesa a Las Vegas Sands, la empresa de Adelson.
Sea o no verdad lo del aeropuerto a coste cero, la comunidad tendrá que lidiar con otra petición de Adelson: la ampliación en un carril más de la Autovía del Suroeste, la A-5, la carretera de Extremadura para el populacho. Una demanda que da más puntos a la opción de Alcorcón, localidad a la que se accede por la A-5, junto con otras como Navalcarnero o Móstoles. La carretera de Extremadura cuenta con más de 400 kilómetros.
Finalmente, la rumorología acecha ya a la tercera de las infraestructuras del dispendio, la alta velocidad: España es, al fin y al cabo, el segundo país del mundo con más kilómetros de raíl de este tipo, solo por detrás de China. A mediados de octubre, una información aparecida en el Diario de Alcalá aseguraba que la conexión por AVE del futuro macrocomplejo iba “tomando forma”. “La idea sigue rondando la cabeza de los responsables de la Comunidad de Madrid”, podía leerse, una ocurrencia confirmada por el teniente de alcalde de Alcalá, Gustavo Severien, al diario alcaladino. El proyecto consistiría en unir mediante una lanzadera de alta velocidad Alcalá de Henares con la capital, por la estación de Chamartín. Habría paradas en Torrejón de Ardoz y Paracuellos, es decir, la zona que disputa con Alcorcón la condición de sede de Eurovegas.