Mientras la escuela pública está en pie de guerra por los recortes, los centros concertados reconocen los 'regalos' de la lideresa
La clara apuesta de Esperanza Aguirre por la privatización progresiva de la educación le ha valido a la 'lideresa' el repudio de sindicatos, profesores y padres de alumnos de centros públicos que, desde el inicio del curso escolar están en pie de guerra contra los recortes impuestos en detrimento de la calidad de la enseñanza. Sin embargo, dentro de la comunidad educativa todavía hay quien la aplaude.
Se trata nada más ni nada menos que la patronal de la enseñanza, que tantos favores debe a la presidenta madrileña. La Confederación española de Centros de Enseñanza (CECE) entregó el pasado 20 de octubre a Aguirre el premio “Educación en Libertad” en reconocimiento a “su larga trayectoria de coherencia y valentía en promover nuevos espacios de libertad en el mundo de la educación”.
Méritos de AguirreEn su página web, la patronal de la enseñanza valora además las “muchas iniciativas” que ha puesto en marcha en estos años que lleva al frente de la Comunidad de Madrid “buscando, en todas ellas, dar prioridad a la libertad de elección de centro por parte de las familias, impulsar la excelencia académica, estimular la evaluación y la transparencia”.
Regalo de 90 millonesAguirre siempre ha tenido una especial sensibilidad hacia las necesidades de la escuela de pago. Como muestra, el regalo de 90 millones de euros a estos centros vía deducciones fiscales. Todo ello mientras recorta en 80 millones el presupuesto destinado a la enseñanza pública.
Terrenos gratisO la reunión en la que participó su consejera de Educación, Lucía Figar, con los ultracatólicos de Comunión y Liberación en el meeting de Rimini (Italia) en 2010. Allí ‘certificó’ la apuesta de su partido y del Gobierno de la Comunidad por la gestión privada de la enseñanza y prometió a esta organización religiosa terrenos gratis para hacer colegios “sostenidos con fondos públicos”.
